nada
Te espero como tantas veces, en el silencio...Casi sin ganas, casi sin esperanzas de encontrarte.
Te espero, como siempre lo hice...Como aquellas tantas veces. Inolvidables.
Esperarte en la puerta de tu casa, con ansias a que bajes. O esperarte con mi mandil en la puerta de tu bar, o en ese sillón esperando ese mensaje. En la puerta de mi casa apoyada sobre mi auto, esperando verte doblar y ver tu cara...esa si fue la mas mágica vez que te espere, sabiendo que serias lo que siempre busque aunque el presente no nos dejo ser nada...Después vinieron otras donde sin esperarte ni encontrarte supe perderte. Como aquella vez, no tan lejana en la puerta de ese bar, con frío y cansancio, expectante por conocerte. A que le tenes miedo, decías? Le tenes miedo al amor, o a la posibilidad del amor? dijiste. Pero esa no seria muy diferente a ninguna otra vez, te esfumaste entre esas palabras...Como siempre, o cada vez, que te espere. No creas que no espero, aunque diga que no lo hago. Solo que de tanto esperarte acabo por encontrarte donde no te busco, y quizás sea esa mi búsqueda, en una sonrisa, en una caricia, en un amor diferente. Son amores sin rostros, sin piel, sin espinas. Son amores temporales los que viví, los que vivo y viviré, y probablemente lo que mas me guste, es amar buscarte, amar encontrándote hasta perderte, una y otra vez. Si suele entristecerme, pero solo de ahí puedo resurgir, Una y otra vez te invento en mi fantasía, como intentando personificarte.
Antes solía detenerme en cada frase, releyendo, o reviviendo cada momento. Hoy opto por prender fuego todo, lo bueno y lo malo. Quedarme solo con esa pequeña porcion de amor que me dieron, aun casi inexistente. No es que hayan sido ellos los crueles, yo era cruel conmigo, buscando amor en donde no había, al menos para mi. No es un papel victimario, es una realidad que no sufro, aprendo a cada momento. Y si al final el camino al amor es un camino duro, lleno de luz y sombra y no mucho mas.
Te espero, como siempre lo hice...Como aquellas tantas veces. Inolvidables.
Esperarte en la puerta de tu casa, con ansias a que bajes. O esperarte con mi mandil en la puerta de tu bar, o en ese sillón esperando ese mensaje. En la puerta de mi casa apoyada sobre mi auto, esperando verte doblar y ver tu cara...esa si fue la mas mágica vez que te espere, sabiendo que serias lo que siempre busque aunque el presente no nos dejo ser nada...Después vinieron otras donde sin esperarte ni encontrarte supe perderte. Como aquella vez, no tan lejana en la puerta de ese bar, con frío y cansancio, expectante por conocerte. A que le tenes miedo, decías? Le tenes miedo al amor, o a la posibilidad del amor? dijiste. Pero esa no seria muy diferente a ninguna otra vez, te esfumaste entre esas palabras...Como siempre, o cada vez, que te espere. No creas que no espero, aunque diga que no lo hago. Solo que de tanto esperarte acabo por encontrarte donde no te busco, y quizás sea esa mi búsqueda, en una sonrisa, en una caricia, en un amor diferente. Son amores sin rostros, sin piel, sin espinas. Son amores temporales los que viví, los que vivo y viviré, y probablemente lo que mas me guste, es amar buscarte, amar encontrándote hasta perderte, una y otra vez. Si suele entristecerme, pero solo de ahí puedo resurgir, Una y otra vez te invento en mi fantasía, como intentando personificarte.
Antes solía detenerme en cada frase, releyendo, o reviviendo cada momento. Hoy opto por prender fuego todo, lo bueno y lo malo. Quedarme solo con esa pequeña porcion de amor que me dieron, aun casi inexistente. No es que hayan sido ellos los crueles, yo era cruel conmigo, buscando amor en donde no había, al menos para mi. No es un papel victimario, es una realidad que no sufro, aprendo a cada momento. Y si al final el camino al amor es un camino duro, lleno de luz y sombra y no mucho mas.
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